Invitan a encuentro de bicicletas clásicas y antiguas

Prepare en traje de los años 30, el silbato del cartero, las alforjas y por supuesto, la bicicleta clasica o antigua. Este 26 de abril se celebra el V Encuentro de Bicicletas Antiguas y Clásicas Zaragoza, donde se celebró la primera reunión de este tipo en toda España.

No necesita pagar inscripciones, ni tener otro mérito. Con llevar su bicicleta y las ganas de transportarse al pasado, es suficiente. La cita inicia a las 11:00 de la mañana en el parque José Antonio Labordeta. De acuerdo a la web de la Asociación Aragonesa de Bicicletas Clásicas y Antiguas, el momento servirá para admirar las bicicletas de los otros, hacerse fotos, conocer gente o reencontrarse con las amistades hechas el año pasado y atender a la prensa.

El verdadero viaje empieza a las 12:30, en lo que se denomina “Paseo hacia el Vermut”. Se hará un paseo corto hasta un lugar cercano al parque donde se beberá vermut, a cargo de la asociación. Hasta las 13:30 se dará espacio a las charlas y la cerveza.

Sin distinción

Aunque se trata de un evento de bicicleta clasica y antigua, la asociación no discrimina. De hecho, hacen una diferenciación entre los tipos de bicicleta: antiguas, cuando tienen una data mayor a 30 años (como las que usaba Audrey Hepburn; clásicas, cuando son de hace 25 años y clásicas nuevas, diseños actuales que buscan emular el encanto de la bicicleta clásica, como las que se ofrecen en Moda Naranjito.

Si bien los organizadores piden que el encuentro sirva para trasladarse a otras épocas, aseguran que la “entrada” está permitida para quien posea cualquier tipo de bicicleta o quien no lleve la ropa más “idónea” (aunque es mucho más divertido si usas el disfraz completo).

A las 13:30 se tiene previsto otro paseo, esta vez de regreso hacia el parque, donde se hará un picnic. Cada uno de los participantes debe llevar su comida. Después se harán juegos, sin premios. El único interés es la diversión.

La historia

La última parada de este evento ocurre a las 19:30, con la despedida hasta el próximo año. Este es el V encuentro, puesto que fue en 2010 que David Castillo, un aficionado a la bicicleta clasica tuvo la idea de juntarse con otros propietarios de bicis para charlar y hacer un picnic.

Castillo es miembro de la comunidad virtual Ciclaclásica y pensó que sería una buena idea reunirse con otros miembros del foro. Varias personas acudieron desde varias partes de país, incluyendo a dueños de bicicletas tipo cruiser y choppers. La buena experiencia les valió las felicitaciones de los asistentes, quienes emularon ese encuentro realizado en Zaragoza, en sus propias regiones, aumentando el interés por las bicis y los miembros de la comunidad.

Además de admirar las bicis de los otros, los encuentros son un buen lugar para pedir ayuda y sugerencias sobre tu propia bicicleta. ¿Cuáles accesorios son los más ajustados al modelo que tengo? ¿Dónde puedo conseguir una cesta adecuada? ¿Quién ofrece la mayor calidad y mejores precios en el mercado?

El 2011 la reunión se repitió con miembros del colectivo pedalea. Fue en ese año que se creó la Asociación Nacional de Bicicletas Antiguas y Clásicas cuyos integrantes también se presentaron en el evento. Aficionados y curiosos completaron el cuadro.

La reunión de 2012 sirvió para que se reuniera un grupo de amantes de las bicicletas antiguas y clásicas en Zaragoza. Fue ese mismo grupo el que más tarde se convirtió en la Asociación Aragonesa de Bicicletas Clásicas y Antiguas, que desde entonces organiza los eventos.

Resaltan que las reuniones y la unión es mérito propio de los aficionados a las bicis antiguas y clásicas. Se niegan a cobrar entrada o sacar otro provecho que no sea el conocer y compartir, porque así sientan las bases del evento: salir de la computadora y atreverse a conversar con alguien que tiene los mismos intereses.

Para este evento esperan gran aforo. En 2013 acudieron cerca de 40 dueños de bicicletas, sin contar con los curiosos que se acercan a preguntar por las bicicletas y la reunión. Aficionados de Castellón, Tarazona, Lécera, Madrid y Barcelona también cumplieron la cita. Hablaron de historia, lugares, compartieron una deliciosa comida, pasearon por las calles de Zaragoza (llamando la atención de los conductores, eso sí) y se llevaron memorias que esperan repetir con este encuentro.